Viendo la extensa e intensa carrera cinematográfica de Tommy Lee Jones sorprende saber que el experimentado actor jamás dio una clase de interpretación. Tras acudir a un colegio sólo de chicos, el joven chaval de Texas destacaba en casi todo. Buen estudiante, se licenció con las mejores calificaciones en la Universidad de Harvard, donde además jugaba al fútbol y compartía habitación con el más tarde Vicepresidente Al Gore. Pocos días después de graduarse consiguió trabajo y agente en Broadway y el resto fue rodado hasta alcanzar el Oscar en 1993 por su papel en El Fugitivo (con Harrison Ford). Otras nominaciones le cayeron con películas como JFK o En el Valle de Elah, pero también nos ha hecho reír con la saga de Men in black. P3